Procaina
Terapia neural
Terapia neural significa tratamiento mediante el sistema nervioso, especialmente el sistema nervioso vegetativo o autónomo, que es el sistema encargado de mantener el equilibrio de absolutamente todas las funciones vitales del organismo.
Existen irritaciones de todo tipo a lo largo de la vida. Irritaciones pueden ser tanto lesiones físicas (intervenciones quirúrgicas, enfermedades sufridas en la infancia o en la edad adulta, cicatrices, infecciones, fracturas, golpes), como impactos emocionales, crisis de ansiedad o situaciones de estrés.
Estas irritaciones van quedando guardadas en la "memoria" del sistema nervioso. También la boca acumula irritaciones que repercuten en todo el organismo.
El impacto de las patologías dentales y de determinados materiales y tratamientos de los dientes en la totalidad del sistema mediante la red nerviosa es importantísimo, siendo el objeto de estudio de la odontología neurofocal, íntimamente ligada a la terapia neural.
Durante las primeras etapas de la vida, este sistema regulador tiene mucho "margen", y puede adaptarse encontrando nuevos circuitos de regulación cuando alguno se bloquea. Pero a medida que vayamos sumando irritaciones llega un momento en que esta capacidad de adaptación se halla sobrepasada, y el sistema ya no puede responder ante una nueva agresión, produciéndose la manifestación de un síntoma o una enfermedad.
A lo largo de la vida, uno va teniendo distintas experiencias. Algunas de ellas se viven como sucesos que producen placer y otras como impactos que provocan sufrimiento. El cuerpo humano dispone de una red de información que llega a todas las células de nuestro cuerpo, que es el sistema nervioso. Gracias a él, están integrados y conectados todos los tejidos, órganos y sistemas que tenemos. Cuando algo ocurre en cualquier parte del cuerpo, todo lo demás se da cuenta, gracias al sistema nervioso. Podríamos comparar el cableado eléctrico de un edificio. Si hay un cortocircuito en cualquier parte de la red eléctrica, se produce un apagón general. Cambiando las luces de cada una de las habitaciones, por ejemplo, no conseguiremos que devuelva la luz. Esto sólo será posible cuando identifiquemos dónde está el cortocircuito y lo reparamos. Del mismo modo, cualquier irritación que afecta a una parte de nuestro sistema nervioso está afectando a la totalidad, pudiendo aparecer trastornos o síntomas en otras partes del cuerpo que están más predispuestas a enfermar.
La terapia neural busca neutralizar estas irritaciones aplicando un anestésico local (generalmente procaína) en bajas concentraciones en los sitios donde el sistema nervioso vegetativo ha sufrido agresión o lesión. Eliminando estos bloqueos se reanuda el intercambio de información y se reactivan los mecanismos de regulación de la red nerviosa, por lo que es el propio organismo el que desarrolla sus propias reacciones auto curativas y consigue un nuevo orden a través de su propia bastante vital.
Por eso la terapia neural entra dentro de las terapias naturales y de la medicina biológica, en las que se considera que la verdadera resolución del proceso parte de la misma persona, cuando se le da el estímulo adecuado para reorganizarse.